Diario de un pañal
Yo ya había tirado la toalla. Me veía hablando en Marzo con las maestras, explicándoles que hay una ley que permite que la nena siga yendo con pañales.... etc, etc, etc... pero mágicamente todo cambió. De un día al otro, Kissi dijo "quiero ir al baño". Y empezó a pedir para ir a la pelela... pis, solo pis. La caca seguía siendo su propiedad y no la iba a entregar tan fácilmente. Días después de ser amiga de la pelea, se animó al inodoro. Pis, solo pis... de caca no se habla... jajaja, seguía siendo cosa suya. Costó una semana más para que finalmente se rindiera y ya enviara todos los depósitos al mismo sitio... Y pum! no más pañales de día... hasta que llegó la noche. Y nuevamente con mucha magia pasó la noche sin pichu y con gloria. Y ahora cuando voy al baño, ella me explica que después de usar el papel higiénico tengo que apretar el botón..