Un año atrás...

 Hace un año caíamos en la guardia y después de varios controles y un urocultivo de días atrás nos daba el positivo de una infección urinaria en curso, sin síntomas, que luego terminó convirtiéndose en una acidosis metabólica, un mes de terapia intensiva, mi nene dormido entubado sin que pudiera hacerle upa, un paro cardíaco de un minuto y medio, miles de estudios, vías, pinchazos... 

Después de vivir esa pesadilla, con un bebé de seis meses, nada pero nada me resulta perturbante. Ni siquiera, su posterior operación de reimplante ureteral fue tan traumatico como lo vivido en abril del 2024.

Todo lo que vivimos después de eso es un regalo. Nathan es un regalo. Cuando ya pensé que no podía tener más bebés, él vino para mostrarme qué a los 42 años aún se podía. Cuando creí que lo perdía, él se quedó para mostrarme que quería vivir. Cuando me quedé sin leche, él hizo que nuestra lactancia aún siga siendo una maravilla...

Y nada de todo esto hubiera sido posible sin el sostén de su papá y su hermana, a quién un 6 de abril dejé de abrigar por las noches, para verla una hora por día en una sala de espera. 

Gratitud infinita a la vida que vivimos juntos, a quienes nos acompañaron durante ese mes infinito, con un mensaje, con una vianda para Kissi, con un abrazo, con su respetuoso silencio.

El que vino con la copa del mundo crece hermoso, como lo merece.

Gracias ♥️ 

Te amamos, campeón 💙







Comentarios

Entradas populares de este blog

Never Gone.

18 de Abril - Paro Cardíaco

Nathan cuando toma teta me abraza.