This Is Us
Si cuando tenía 16 años alguien me decía que a mis 30 iba a tener el honor de darles la mano a los Backstreet Boys, no le creía ni de casualidad.
Recuerdo que todo empezó con Belén que me insistía para que mire un video en “The Box”. “A vos Cintia, que te gusta siempre lo mismo que a mí, te van a encantar”, dijo. Belén es la mejor amiga de mi hermana Natalí y tiene 4 años menos que yo. Llámenlo como quieran: o a ella le gustan las cosas de gente más grande o a mí me gustan las cosas de gente más chica (risas obvias).
La cosa es que finalmente vi el video “We’ve got it goin’on” y no sólo me gustaron, sino que fui por más. Entonces busqué el video de “Get Down” y después morí con “Quit playin’ games”. ¡Me estaba transformando en una fan de los Backstreet Boys!
Al poco tiempo ya tenía dos discos de BSB y estaba esperando la llegada al Parque de la Costa. Una locura total. Fuimos con mis dos hermanas y mamá a verlos. Hicimos la fila desde la madrugada y pese a eso, no logramos entrar. Después de corridas y gritos al por mayor, mamá decidió que volviésemos a casa y los veamos por la tele.
Por suerte, a los pocos meses pudimos verlos en vivo en la cancha de Boca, Belén, mi hermana Natalí y yo. Pasaron los años y seguimos con el fanatismo, al punto de llamar a una de mis perras, Denise, como la madre de uno de ellos. Llegó la hora de River, con la gira “Black and Blue”. Esta vez, se sumaba mi hermana Clyde. Los años siguientes seguimos escuchándolos día a día, siempre esperando que vinieran a la Argentina.
Y un día, mientras trabajaba leo en un diario de Tucumán: “Los Backstreet Boys vienen en marzo”. Con los obvios ataques de nervios, llamé a mis amigas, saqué la entrada y ahí estaba en Marzo del 2009, llorando por ellos nuevamente, como cuando tenía 16. No sabía yo, que perteneciendo al fans club, podría uno tener la posibilidad de estar en el Soundcheck. De modo que tras la noticia, empezamos Belén y yo a rezar por la llegada de otro recital.
Creo que el destino hizo que no esperáramos más que dos años: ¡BSB volvían en marzo de 2011! Emprendimos la operación SC y conseguimos las entradas, sólo faltaba esperar la llegada del día.
Y cuando el 1 de Marzo de 2011 estábamos en el Luna Park, esperando para entrar, volvieron a mi mente miles de recuerdos. Cada canción significó algo de mi vida. Cada melodía, un momento.
Lo que vivimos en el Soundcheck sólo nosotras lo sabemos. Son sentimientos que sólo entenderán quienes estuvieron ahí. Pero les aseguro que son imborrables y transformaron al 1 de Marzo de 2011 en uno de los días más felices de nuestras vidas. Nuestro sueño se hacía realidad.
Y en esto tiene mucho que ver lo que yo llamo “la magia de la música”. Lo que para muchos son “cuatro pibes bailando que simulan cantar”, para mí (y para muchas más, se los aseguro) son los cuatro importantes personas que le dieron sonido a nuestras vidas.
Hoy como nunca antes, y gracias a la tecnología que avanza a pasos agigantados, tomo conexión con esas muchas que sienten la misma pasión que yo. Lo maravilloso de esto es que todas nos contentamos con cada foto con los BSB, nadie siente envidia, todas somos felices si alguna otra logró estar diez segundos más con ellos. Todas gritamos si algunos de ellos miró a nuestra cámara de fotos para sonreírnos. Todas somos cómplices. Y todas somos felices. Y eso que con algunas apenas nos conocemos y con otras la relación es sólo virtual.
Si cuando tenía 16 años alguien me decía que a mis 30 iba a tener el honor de seguir siendo fan de los Backstreet Boys, le hubiese creído, y ahora que lo vivo, me doy cuenta que no me he equivocado.
“Love is the universal language. Music is the language of love.” AJ McLean.
Comentarios